Publicado por Planeta en 1952.
329 páginas (ADE).
Manuel Pombo Angulo constituye la auténtica revelación literaria de la generación posterior a la guerra. Antes de ella no había, casi, asomado al campo de las letras, entre otras razones porque su juventud no le dió espacio a ello; después, se impone entre la pléyade de los que cultivan la novela, y su carrera constituye una rápida y continua serie de éxitos; con «Hospital General» queda, entre una nube de polémicas, finalista del premio Nadal; con «Sin Patria» obtiene el Premio Nacional de Literatura; con «Valle Sombrío» gana el concurso convocado por don Agustín Pujol, que ha constituído el más resonado acontecimiento literario de 1951.
Dos cualidades primordiales se citan en este joven y ya consagrado escritor; su inspiración y su conocimiento del oficio. La primera le permite imaginar los más diversos temas y actuar a la par, y siempre en puesto señero, en el periodismo, el teatro, la poesía y la novela, su aspecto más destacado y por el que siente mayor vocación; mediante el segundo realiza, acabada y originalmente, sus imaginaciones, hasta el punto que muchas veces asombra la amplitud y la hondura de su labor. La juventud no vuelve, novela que Editorial Planeta presenta a sus lectores, es buena prueba de ello. Concebida durante sus años de corresponsal de «Ya» y «La Vanguardia» en Alemania, recoge las tremendas experiencias de aquella época, pero dentro de una trama imaginativa y romántica que las llena de singular atracción. Novela dura y real en muchos de sus capítulos, aparece en otros impregnada por ese personal lirismo de Pombo Angulo, que presta a todas sus obras el encanto de algo reflejado en un espejo de otra época.
Creemos que en La juventud no vuelve —la novela de una generación que conjugó la fe y el sacrificio— se concentran las más destacadas y selectas características de nuestro novelista. La juventud no vuelve tiene, a veces, la grandiosidad de la epopeya y otras la ternura de la intimidad. Y siempre ese especial modo de hacer y sentir de Pombo Angulo, el escritor que pasa por la vida con los ojos tan abiertos como su corazón.