Publicado por Planeta en 1972.
230 páginas (ADE).
«Pablo» —Pablo San José— nació en la ciudad marroquí de Larache hace 45 años, aunque realmente aparenta menos edad, según sus íntimos. Como casi todos los españoles, fue estudiante de bachiller y oficinista, labor ésta en que, muy a pesar suyo, estuvo luengos años sudando tinta. Como fruto de sus experiencias en los ambientes de oficinas, decidió aligerar su cruz por vía del humor, creando la «oficina siniestra» en la revista La Codorniz. También ha hecho populares a Doña Úrsula, colegialas uniformadas, soldados, mariscales, curas-obreros, parias, enanitos y un gitano que lleva un oso. Dibuja desde que tiene uso de razón, lo cual es un decir. En la actualidad, ya liberado del Debe y el Haber, hace «monos» para La voz social, Autopista, Siembra y la citada Codorniz (donde ingresó en 1956), y su firma ha aparecido en casi todas las publicaciones españolas.
La burocracia tenebrosa presenta, en una serie de dibujos, viñetas y chistes, el siniestro mundo oficinesco —repleto de pelotas (desde el pelota 1.º al 120.384), jefazos de personal y fláccidos empleados—, que ha dado merecida fama al autor.